Cuando un restaurante lamentablemente cerró sus puertas en Puerto Rico, les pregunté si podía comprar una de sus sillas ya que desde hacía algún tiempo tenía este proyecto en mi cabeza. No solo pude comprarla, sino que compré la silla donde habitualmente me sentaba a almorzar un par de veces a la semana por varios años.

«The Chair Project» es un proyecto personal de fotografía. La intención del mismo (además de hacer algo que me encanta), es la de documentar a varias personas, algunas conocidas y otras no, a través de una serie de retratos donde todas aparecerán sentadas en la misma silla en distintos lugares de la isla.

El propósito de utilizar la silla, es el de tener un elemento visual que unifique el proyecto, pero a la vez, es el de ofrecerle a la persona un lugar más «relax» desde donde pueda enfrentar la cámara y que ayude a provocar una buena conversación en el proceso.

En un mundo lleno de amigos virtuales que nunca se ven la cara, este pequeño proyecto me da la oportunidad de pasar unas cuantas horas conversando «the old fashioned way».

Planificado al estilo «road trip», una vez que acordamos el día y la hora, empezamos a intercambiar referencias de vestuario, locaciones y otros detalles para el día del shooting. Ese día salimos con un par de fotos en la cabeza pero también abiertos a la improvisación.

Michelle y Viviana son las dos primeras personas que retrato. Con Michelle aprendí lo duro y las horas largas que significa trabajar con vestuarios para comerciales de televisión y películas. Como director creativo un «me gusta o no me gusta» y «hay que buscar otra falda adicional» no suena como algo muy complicado, pero después de conversar ese día con ella, mi respeto a lo que hace es mucho más grande. Los malos ratos y guiar como una loca buscando en 20 tiendas la falda adicional que pedí para la tarde, no es cáscara de coco.

Con Viviana conversé mucho de todas esas otras cosas que le encanta hacer además de trabajar en digital (entre ellas esta) ya que durante varios años modeló en distintas ocasiones y ahora, después de este shooting,  está «embollá» para empezar de nuevo.

Aquí les dejo unas cuantas fotos de Michelle y Viviana. Ambas me regalaron su tiempo sin pedir nada a cambio y estoy super agradecido por esto.

Poco a poco iré escribiendo y subiendo fotos nuevas de las próximas personas a las que invitaré a ser parte de «The Chair Project». Espero que les guste, yo me lo estoy disfrutando un montón 🙂